COVID-19: Educación en línea
Un día en el salón de clases
(Antes de Covid-19):
Alumno
1: Tengo frío, deberían darnos clases por internet, ojalá pudiera estar en casa
acostado en mi cama, tapadito y escuchando la clase desde el celular.
Alumno
2: Sí te imaginas, sería muy “chido”, lástima que no sea posible.
Alumno
3: Ya dejen de decir tonterías, cómo creen que van a tomar clases así, de ese
caso inscríbanse a una escuela en línea no en ésta, aquí las clases son en el
salón.
Y
de repente, sin previo aviso, llegó COVID-19, nos vamos a casa y regresamos en
un par de semanas, incertidumbre, miedo, emociones encontradas, no puedes salir
debes permanecer en casa, es posible que la situación empeore así que no serán
un par de semanas, serán tal vez meses viviendo así, con tal de no enfermar y
morir…
Había
pasado ya tiempo, la vida sigue y la escuela también, había que buscar una
estrategia dinámica y de fácil acceso para todos, retomar las clases era todo
un reto para el sistema educativo, que hasta ese momento era presencial por tradición.
Echar mano de una herramienta que todos conocíamos pero que pocas veces la utilizábamos
en el proceso enseñanza-aprendizaje, las llamadas Tecnologías de la Información
y la Comunicación (TIC), se convertía en todo un reto frente a nuestra forma tradicional
de impartir la clase.
El
coronavirus cambió instantáneamente la forma en que se imparte la educación, ya
que la escuela y la casa, ahora se convierten en el mismo lugar, tanto para el
alumno como para el profesor y la realidad para muchos es que la mayoría de las
escuelas no estaban preparadas para éste cambio
que permite reconocer que el acceso desigual a internet es tan solo uno
de los muchos problemas que enfrenta nuestro sistema educativo a nivel nacional
y que el conocimiento de las TIC es fundamental, no solo necesario implementar
éstas herramientas de ahora en adelante en el sistema educativo y en todos los
niveles, no solo para dar y tomar una clase, sino también como apoyo en las
clases presenciales.